La hipoacusia es un problema que afecta a más de 1.500 millones de personas en el mundo, reduciendo su calidad de vida. En muchos casos, estos inconvenientes se resuelven al utilizar un dispositivo que permite captar mejor los sonidos, como los audífonos para la sordera.

Sin embargo, muchos pacientes con problemas auditivos muestra cierto rechazo al uso de los audífonos, debido a que los consideran desagradables estéticamente. Cuando se inició esta tecnología, los dispositivos solían ser muy visibles, pero cada vez más se hacen modelos más discretos.

Los llamados audífonos invisibles son casi imperceptibles y mantienen todas las prestaciones de equipos mucho más grandes. Hay diversos tipos que se adaptan a tus características particulares, por lo que debes conocerlos antes de tomar una decisión.

¿Cuáles son los audífonos invisibles?

La mayoría de las personas con pérdidas auditivas, pueden mejorar su situación al utilizar audífonos para la sordera, aunque muchos se niegan a usarlos si son muy visibles. Al acudir al especialista, es necesario determinar el tipo de dispositivo que se adapta mejor a las necesidades del paciente.

En general, existen tres tipos básicos de audífonos, siendo los más visibles los BTE o retroauriculales, en los cuales casi todo el dispositivo va detrás de la oreja. Otros son los RIE, en el que el auricular se inserta dentro del pabellón del oído y suele ser un poco más pequeños.

No obstante, los conocidos como audífonos invisibles son aquellos que se colocan total o parcialmente dentro del canal auditivo. Los mismos se tienden a fabricar a la medida de cada paciente y suelen ser casi imperceptibles a la vista.

Para adaptarlos a cada persona, se hacen moldes del canal auditivo u otras partes del oído para elaborar la carcasa donde se incluyen todos los componentes. Algunos de sus modelos son fabricados con una impresora 3D y, según su tamaño, incorporan una mayor cantidad de funciones y tienen distintas capacidades de ampliación.

Al momento de buscar el tipo de audífono invisible que más se ajusta a tus necesidades, debes acudir a expertos en audiología. Te invito a conocer https://www.audicostaudifonos.com/tipos-de-audifonos/, donde te ofrecen dispositivos de última tecnología y la asesoría de los mejores profesionales.

Tipos de audífonos invisibles

A pesar de que son bastante discretos, no todos los audífonos invisibles son iguales, ya que algunos tienen partes que pueden ser ligeramente visibles. Los mismos se suelen diferenciar por la posición en la cual encajan y las funciones que ofrecen al usuario:

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ITE (Intrauriculares)

Son audífonos que se ubican completamente dentro de la oreja, ocupando prácticamente toda la cavidad del oído externo. Conocidos también como de carcasa completa, constan de una parte que se acopla en la zona de la concha y es aquí donde se ubican todas las partes funcionales del audífono.

La carcasa se elabora a medida, a fin de que se ajuste a la concha y permita llevarlos por períodos prolongados sin causar molestia. Debido a que es el tipo de audífono invisible de mayor tamaño, se consideran los más adecuados para personas con hipoacusia más grave.

Esto se debe que permiten colocar pilas de mayor tamaño, por lo que el auricular puede tener una mayor potencia, además de permitir más funciones al usuario. La carcasa se fabrica utilizando plásticos hipoalergénicos, y son bastante fáciles de colocar y retirar del oído.

Encontrarás modelos que se conectan de forma inalámbrica a tus dispositivos electrónicos y tienen mayor autonomía. Además, su mantenimiento y limpieza suele ser más sencilla que en auriculares de menor tamaño.

ITC (Dentro del canal)

Estos audífonos se colocan dentro del canal auditivo de la persona, por lo que la carcasa se diseña para que se acople completamente a la forma de este. No obstante, la zona de la pletina queda en la parte más externa y es ligeramente visible.

El sistema de control de volumen, micrófono y las pilas se ubican hacia el exterior del audífono. Esto permite que exista una mayor direccionalidad del sonido, por lo que se capta mejor el sonido en ambientes ruidosos.

La parte de la carcasa que queda expuesta, suele tener el color de la piel de la persona, a fin de que pase desapercibida. Se recomienda para personas con hipoacusia de leve a moderada, debido a que no permite gran cantidad de funciones o un amplificador muy potente.

Son bastante cómodos para usarlos regularmente, ya que se ajustan perfectamente a las características anatómicas de cada usuario. Asimismo, tienen una buena autonomía y hay posibilidad de colocar controles como pulsadores y otros de acceso fácil.

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CIC (completamente en el canal)

En este caso, se trata de un dispositivo que se inserta totalmente en el canal y se diseña a partir de las impresiones particulares del usuario. Se acoplan completamente a la zona de entrada del conducto auditivo y son muy difíciles de apreciar externamente.

Por su tamaño reducido, son bastante cómodos de llevar, por lo que la persona no percibe su presencia y permiten captar la direccionalidad del sonido. Además, por su ubicación, son mucho menos sensibles a problemas de interferencia por el viento y/o dispositivos electrónicos.

En cuanto a la facilidad de manipulación, cuentan con un pequeño hilo para retirarlos que es transparente. También hay modelos disponibles con conectividad inalámbrica y se pueden personalizar algunas de sus funciones.

Están recomendados para personas con hipoacusia leve a moderada, por las limitaciones de su amplificador. Asimismo, no son la mejor opción para aquellos usuarios que tienden a acumular cerumen o tienen un canal auditivo muy estrecho.

IIC (invisibles en el canal)

Cuando quieres audífonos que realmente sean imperceptibles a la vista, estos audífonos elaboran a partir de una impresión exacta del canal auditivo. Se encuentran entre los dispositivos más buscados, llegando a ser los preferidos en más de un 40% de los pacientes.

Una de sus ventajas, es que los ruidos por interferencia son casi inexistentes, ya que se encuentran totalmente protegidos dentro del canal. Asimismo, se facilita poder utilizar auriculares para la reproducción de música o con el Smartphone.

Otro de los beneficios de los audífonos IIC es que reducen los problemas de oclusión, que llegan a distorsionar los sonidos que se reciben. Y al estar bastante cercanos al tímpano, también se evitan los pitidos o silbidos que producen otros tipos de audífonos por la retroalimentación.

Sin embargo, se consideran una opción principalmente para personas con hipoacusia leve, ya que tienen poca potencia y cuentan con una baja autonomía por su tamaño. Por otra parte, no se adaptan bien a personas con un canal auditivo corto o de formas poco comunes, y no se recomiendan para usuarios con problemas de destreza al manipularlos.