Deshacerse de las várices puede parecer un desafío, especialmente si en el pasado la cirugía era la única opción disponible, que consistía en extirpar la vena dilatada. Sin embargo, en tiempos recientes, han surgido métodos más modernos y menos invasivos que han demostrado ser muy efectivos. Entre estas nuevas técnicas, la microespuma se ha destacado como una solución prometedora. E

En este artículo, te explicamos cómo funciona la técnica de la microespuma y los beneficios que ofrece para tratar las várices de manera más cómoda y eficiente.

¿Qué es una vena varicosa?

Una vena varicosa representa la fase avanzada de la insuficiencia venosa. Principalmente afecta a dos venas superficiales en las piernas: la vena safena mayor y la vena safena menor. Cuando una vena se dilata de forma permanente, su sistema de válvulas, que normalmente evita el retroceso de la sangre y contrarresta la gravedad, ya no funciona de manera efectiva. Imagina un río cuyo flujo está obstruido. Esta disfunción provoca que los pacientes experimenten presión en las piernas, una sensación frecuentemente descrita como piernas pesadas.

¿Cuáles son las consecuencias?

Las venas varicosas, aunque no son peligrosas por sí solas, tienden a progresar lentamente. Si no presentas síntomas, no es necesario que consultes a un médico de inmediato. Sin embargo, es importante saber que no mejorarán por sí solas y tienden a empeorar con el tiempo. A medida que pasa el tiempo, las venas pueden volverse cada vez más dilatadas y menos funcionales.

Las varices pueden causar dolor en las piernas, especialmente durante el verano. Además del malestar físico, también tienen un impacto estético, ya que pueden hacer que las venas se vuelvan visibles y poco atractivas. Con el tiempo, la sangre estancada en estas venas puede afectar la piel, volviéndola más seca y susceptible a la aparición de eczema.

Otro problema asociado con las varices es la ruptura de las venas. Si una vena se hincha demasiado, cualquier pequeño golpe puede causar una lesión que sangra profusamente. Aunque esto suele ser más impresionante que grave, es fundamental tratar la herida adecuadamente: presiona con un paño limpio, recuéstate y eleva la pierna para reducir el sangrado.

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Una complicación más grave, que puede surgir cuando las varices han avanzado durante años, es la flebitis. Si se forma un coágulo de sangre en una vena superficial, se conoce como paraflebitis y generalmente es benigno. Sin embargo, si el coágulo obstruye una vena profunda, puede desarrollarse una flebitis profunda, con el riesgo de que el coágulo se desplace y cause una embolia pulmonar.

Además, es importante estar atento a las úlceras en las piernas. Estas heridas crónicas pueden aparecer cuando la piel está severamente dañada, y cualquier lesión menor puede ser difícil de curar. Las úlceras son dolorosas y pueden infectarse, e incluso poner en riesgo la salud de la pierna. En caso de úlceras, es fundamental buscar atención médica rápidamente.

¿Cómo es el tratamiento con microespuma?

Analizando las diferentes técnicas para eliminar o reducir las varices nos damos cuenta de que la técnica con microespuma es la más fiable y con mejores resultados. Por ejemplo, desde la clínica de varices en Barcelona de Varicenter suele ser la técnica que más usan por los buenos resultados que ofrece.

La microespuma es una variante de la escleroterapia, un tratamiento que consiste en inyectar una solución especial en la vena afectada. A diferencia de las soluciones líquidas convencionales, la microespuma se obtiene al mezclar la solución con aire o gas, creando una espuma ligera pero densa que se adhiere de manera más efectiva a las paredes internas de las venas. Esta espuma ayuda a desplazar la sangre y cubre una mayor área dentro de la vena, aumentando la eficacia del tratamiento.

Durante el procedimiento, se utiliza una aguja delgada guiada por ecografía para permitir que el médico observe la vena en tiempo real y asegure una inyección precisa de la espuma. Al entrar en contacto con las paredes internas de la vena, la microespuma desencadena una respuesta inflamatoria controlada que provoca el colapso y la eventual desaparición de la vena tratada.

Beneficios del tratamiento de microespuma

Son muchas las personas que están pensando en disfrutar de ese tratamiento, pero no siempre tienen claro que sea la mejor opción. Sin lugar a dudas, lo mejor es preguntar al experto, el cual analizará tu situación y te dará la mejor recomendación. Si nos centramos en los beneficios podemos destacar los siguientes.

  • Eficiencia: sin lugar a dudas es un tratamiento realmente eficiente, lo que significa que los resultados a través de la tasa de éxito son realmente buenos. Es una técnica que se puede usar en venas de diferentes tamaños, lo que ayuda a que el resultado final sea de más calidad.
  • No es invasivo: es un tratamiento que no va ligado a la cirugía. El proceso no es doloroso y el paciente puede volver a hacer su vida normal desde el tratamiento. Se agradece que no hay que hospitalizar.
  • Resultados: es verdad que el resultado no se puede conseguir en la primera visita, pero sí que se pueden ver los beneficios desde la primera sesión. Dependiendo del estado, la persona deberá someterse a un número determinado de sesiones. Lo que está claro es que en pocas sesiones se puede conseguir un resultado óptimo. Eso sí, siempre de la mano de verdaderos profesionales.
  • Riesgo: al ser un tratamiento de poco riesgo los efectos secundarios son mínimos. Como hemos comentado, el paciente siempre puede salir por su propio pie y no necesita de hospitalización. Un dato que deberás tener muy en cuenta a la hora de elegir un tratamiento para las varices.
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¿Cuáles son los cuidados posteriores a la microespuma?

Después del tratamiento con microespuma para varices, es crucial seguir ciertas indicaciones para obtener los mejores resultados. Usa medias de compresión durante el tiempo recomendado para mejorar la circulación y ayudar a la reabsorción de las venas tratadas. Realiza caminatas ligeras y evita actividades que incrementen la presión en las piernas.

Es normal experimentar moretones, hinchazón o enrojecimiento, pero estos síntomas suelen ser leves y temporales. Asiste a las citas de seguimiento para que el médico pueda monitorear tu progreso y ajustar el tratamiento si es necesario. Estos cuidados contribuirán a una recuperación eficaz y a la reducción de síntomas.